Entre los Simios

23/1/08

Pájaros sin nido

En las últimas semanas los medios han hablado masivamente (¡por fin!) de uno de los principales dramas del conflicto colombiano, y más allá de la ecuación siniestra Ejército-FARC-narcotráfico.

Se trata de la (no) vida de las personas secuestradas por las FARC. De lo horrible de la reclusión, de las penalidades de la vida en la selva, del alejamiento de los seres queridos, del miedo a un rescate forzoso de los militares que acabe con su vida, de enfermedades... Se ha practicado una suerte de periodismo empático que coloca al consumidor de medios al lado de la víctima, y no del victimario.

Está bien que se hable de los secuestros, es un avance. Pero el conflicto colombiano presenta otras realidades tan o más oscuras... Hay otras historias desgarradoras que no consiguen cuota en los medios pero que son igualmente terribles. Porque afectan a muchas personas, porque se viven en silencio, porque no lucen espectacularmente ni despiertan el morbo, como por ejemplo el caso del hijo de Clara Rojas con el guerrillero de las FARC durante su cautiverio en la selva.

Me refiero al tema de los desplazados o refugiados por el conflicto. Desarraigo, miedo, muerte, amenazas, hundimiento de un proyecto de vida...

Son casi tres millones de personas (en un país de poco más de 40 millones...) las que han huido del conflicto y han generado un gran problema humanitario que se silencia cuando se simplifica el conflicto colombiano a algo que enfrenta a Gobierno, guerrillas y narcos.

Casi 265.000 colombianos ya se encuentran en el vecino Ecuador, 16.000 de los cuales con estatuto de refugiado por parte de ACNUR. El único propósito para cruzar la permeable frontera entre los dos países: salvar la vida. Son, como dice una mujer colombiana refugiada, “pájaros sin nido”. Añado que también sin voz, como la mayoría de los débiles. Un informe de la interesantísima organización Medios para la Paz ("que los medios se conviertan en actor de paz") habla ahora de estas personas.

+ Informe completo en Medios para la Paz

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