Kapuscinski, periodismo mágico

"Periodista mágico, legendario... "Dios"... Son algunos de los calificativos utilizados para referirse al periodista y ensayista polaco Ryszard Kapuscinski, que murió ayer a los 75 años. Quizás se exageraba, pero lo cierto es que Kapuscinski ha sido todo un mito para muchas generaciones de periodistas.

Defensor del periodismo serio, ético, comprometido, reportajeó como nunca continentes como el africano o la caída del comunismo en la URSS de finales de los 80. Siempre preocupado por el periodismo que viene (caída en barrena) y por la formación de los futuros periodistas, se prodigó en visitas y charlas académicas. A quienes asistían a sus charlas, les transmitía su preocupación por el estado del periodismo, por su cicatería actual, sus rutinas adormecedoras, su falta de compromiso ético con los pueblos empobrecidos y con las personas...

Pero también insistía en la necesidad de crear un periodismo de rostro humano, de labor social. Su mirada franca, enérgica, con esas cejas de persona inteligente, con ese rictus severo de profesor sabio... Leer más...

Ébano, El Imperio o Los cínicos no son para este oficio son tres obras básicas del polaco que todo el que se dice periodista, o quiere (aún...) serlo, debería leer y releer a menudo.

Algunas de sus citas (son tantas...):

"Para escribir una página se deben haber leído 100". ¿Cuántos periodistas de hoy son lectores empedernidos?
"No se puede escribir de alguien con quien no has compartido como mínimo algún momento de su vida".
"Los cinco sentidos del periodista: ver, oír, estar, pensar y compartir". La esencia del periodismo. Muchos se saltan los dos últimos.

No quedan muchos Kapuscinskis en el periodismo actual. Estamos huérfanos.

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